-Cuando encuentro una trampa para ratas, salto encima del resorte, cojo el alambre del cepo que baja a toda leche con los dientes, lo muerdo 20 veces para afilarme la dentadura, destrozo la trampa y me como el queso.
-Coño!- dicen las otras.
La rata rusa mira a la yankee, pide un vodka, se lo bebe de un trago, rompe el vaso en un rincon, y dice:
- Cuando encuentro una bolsa de veneno para ratas, me lo llevo a casa, lo pongo en el microondas [esto es una fantasmada porque todos sabemos que las ratas rusas no tienen microondas, pero en fin...], hago palomitas, y me las como viendo una peli y bebiendome una cerveza.
-Joder! - dicen las otras.
Acto seguido, ambas ratas se dan la vuelta y miran a la rata Asturiana. Esta pide una caña, toma un sorbito, le da una calada al pitillo, las mira, se bebe otro sorbito, deja el vaso, y dice: -Perdonadme, pero no puedo quedarme a contaros nada... Tengo que ir a casa a follarme al gato.


