La esposa: "¡¡Mi marido!! ¡Corre y métete en el armario!"
El amante se introduce en el armario. No había tiempo para otras opciones.
Lo primero que hace el marido, una vez entra en la habitación, es abrir el armario para colgar su gabardina.
Y ahí estaba el buen mozo mulato, desnudito y con su rabo de 20 cm. aún enhiesto.
El marido: "¿Qué... Qué... Qué demonios hace usted aquí?"
El amante: "Bueno... Tú verás blother, yo estaba tan tranquilo con mis primas Yarmila y Daisy tomándome un mojito en una playa de Punta Cana.
De repente, se levantó un temporal, tú sabes, y un tornado me arrastró elevándome por los cielos...
Aparecí en Estocolmo, luego me llevó a Berlín, Budapest y París para finalmente terminar acá donde me ve, blother..."
El marido: "Es la contestación más estúpida que he oído en mi vida"
El amante: "Pues anda que la plegunta..."

